Baton Rouge se encuentra en la necesidad de una transformación significativa para sus carreteras. Una necesidad que la alcaldesa-presidenta Sharon Weston Broome ha abordado recientemente mediante un ambicioso plan.
Este plan cuenta con un importante presupuesto de $25,6 millones y una visión clara para mejorar la seguridad vial y las infraestructuras en general.
El plan de acción propuesto sigue dos fases distintas. Prioriza meticulosamente la selección de carreteras para su rehabilitación basándose en su estado actual, el volumen de tráfico diario y la urgencia de las calles cercanas que requieren atención. El objetivo es abordar los problemas más acuciantes con prontitud y eficacia.
Uno de los aspectos más destacables de esta iniciativa es su compromiso con la calidad. En lugar de basarse en arreglos temporales, el plan asigna fondos adicionales del Programa Camino a la Rehabilitación para llevar a cabo una amplia repavimentación. Las calles que ya no puedan parchearse recibirán la atención que necesitan, garantizando que puedan servir a la comunidad en los años venideros.
La mejora de la seguridad es una de las principales preocupaciones del proyecto. Se destinarán $1,5 millones adicionales a la renovación de las bandas y al repintado, con especial atención a los marcadores para ayudar a los conductores, especialmente durante la noche. Aproximadamente 22.000 balizas se colocarán estratégicamente en las carreteras para que la conducción nocturna sea más segura y cómoda. Desde 50% de víctimas mortales en accidentes de tráfico se producen por la noche, se trata de un gran paso hacia unas carreteras más seguras.
Es esencial recordar que este proyecto de rehabilitación de carreteras se llevará a cabo al mismo tiempo que otras dos iniciativas importantes: el proyecto MoveBR y el proyecto de ampliación de la I-10. Estos esfuerzos paralelos tienen como objetivo mejorar las infraestructuras de transporte del Baton Rouge, garantizando unos desplazamientos más fluidos y seguros para sus residentes. Estos esfuerzos paralelos pretenden mejorar las infraestructuras de transporte del Baton Rouge, garantizando unos desplazamientos más fluidos y seguros para sus residentes.
La iniciativa de rehabilitación de carreteras Baton Rouge es un faro de esperanza para los residentes que buscan vías más seguras y eficientes. Con el inicio de la primera fase a finales de este año, la ciudad puede esperar calles mejores, más seguras y más fiables.