Aunque le resulte familiar y cómodo circular por las carreteras de noche, hay peligros ocultos que quizá desconozca. Con los días más cortos del invierno, es posible que pases más horas conduciendo de noche, lo que puede aumentar el riesgo de sufrir un accidente grave.
Según el Consejo Nacional de Seguridad, el riesgo de verse implicado en un accidente de tráfico es muy alto. accidente mortal es tres veces mayor de noche que de día. Es importante saber cuáles son los peligros nocturnos y cómo mantenerse seguro en la carretera para poder prevenir un incidente.
Cuando se pone el sol, la falta de luz natural puede afectar a la vista. Esto incluye la visión central, la percepción de la profundidad, la visión periférica y el reconocimiento de los colores. Incluso con farolas y faros, puede ser difícil determinar la velocidad y la distancia de los vehículos que se aproximan. Los faros brillantes también pueden causar ceguera temporal al tráfico que se aproxima. Esto es especialmente cierto para quienes padecen enfermedades oculares, como degeneración macular, glaucoma y cataratas.
El número de conductores intoxicados, somnolientos y distraídos también aumenta por la noche. Según la Fundación Nacional del Sueño, 103 millones de personas admiten haberse quedado dormidas mientras conducían. La mayoría de los accidentes por fatiga del conductor y por conducir ebrio se producen entre la medianoche y las 6 de la mañana, según informa la National Highway Traffic Safety Administration.
Hay medidas que puede tomar para combatir los peligros nocturnos, entre ellas las siguientes:
Aunque no puedes controlar las acciones de los demás, sí puedes asegurarte de hacer todo lo posible para limitar el riesgo de sufrir un accidente nocturno grave.